Pachacuti: Repensado la Crisis Desde la Efimeridad Humana
Imagen de montañas y volcanes a lo largo de la cordillera de los Andes. Andes, 2018. Imagen de Alexander Gerst en Wikimedia Commons
Luego de la pandemia, el mundo se dio cuenta de lo vulnerable que es la humanidad, como conjunto. Aún hoy en día nos encontramos frente a amenazas latentes en nuestro planeta, con las que convivimos y sobre las cuales no sabemos tanto como nos gustaría creer. Por ejemplo, el brutal y rápido avance del COVID-19 demostró lo poco preparado que estábamos como grupo para enfrentar una pandemia y abrió la puerta a una verdad que la humanidad por siglos ha intentado obviar: la efimeridad de nuestra existencia. Esto provocó que luego de este evento, la cantidad de estudios sobre crisis, y la plétora de conceptos que se desprenden de esta, aumentasen exponencialmente. Trabajos como el de Bruno Latour (2021), han sido esenciales para repensar qué se entiende por crisis, las ramificaciones que esta tiene en diversas dimensiones, la imposibilidad de un retorno al mundo prepandémico o la multiplicidad de elementos más allá de lo humano involucrados en la supervivencia del planeta.
Por ello, debido a que en la actualidad la crisis es un estado compartido por todo nuestro mundo, es importante repensar dicho concepto desde múltiples perspectivas globales que problematicen las mismas estructuras que decantaron en el contexto actual en que vivimos. De esa manera, el objetivo de este ensayo es partir de dicha necesidad de repensar la crisis y proponer desde mi investigación, mi interés y mi cultura, ¿cómo se entiende la crisis en los Andes? Con esto no quiero afirmar que en dicha región solo exista una única manera de entender este concepto, sino, por el contrario, debido a que fue y sigue siendo zona afectada por la colonización, la idea de crisis se entiende desde una perspectiva propia de la mezcla de saberes originarios de la región y también de la colonia. Esto genera un enfoque sumamente particular que parte de la renovación y la necesidad de cambio como conceptos y realidades que afectan su forma de entender el mundo.
Para entender lo que implica la crisis en los Andes, parto del concepto del pachacuti, el cual se define como: “…el momento en el que se desencadenan las fuerzas de inversión constituyéndose un nuevo orden. Sin embargo, teniendo en cuenta que los cambios se dan en analogía respecto del futuro y el pasado, resulta que los pachacutis representan momentos limítrofes: tránsito de una disposición a otra” (Lozada 238). En los Andes, este concepto implica una transformación total del mundo para la construcción de uno nuevo. Así, la crisis se convierte en un elemento de transición entre diferentes realidades. De esa manera, por ejemplo, el mundo de los runakunas[1] es producto de la destrucción de un mundo anterior (Allen 44); y, por lo tanto, este también será el germen del siguiente. Esto implica que dentro de la perspectiva andina la transformación siempre se construye desde una lógica de secuencia temporal que no posiciona a la interpretación humana como el centro del pachacuti, sino como un testigo más dentro de esta, a la par de otros elementos no-humanos como pueden ser la vegetación, los animales, los espacios geográficos, etc.
Así, la importancia del espectador durante la crisis resalta la importancia de la visualidad en el entendimiento del tiempo en los Andes. La temporalidad andina ha sido descrita comúnmente como espiral, pero no entendida como la circularidad occidental, sino como un ciclo en que el elemento humano y no-humano validan el paso del tiempo a través de lo que observan: “Time moves ahead like a river to drop from view into that subterranean interior that contains both past and future. Future time does not lie ahead of us but comes up at our backs” (Allen 195). Esta característica está tan arraigada en su forma de entender la temporalidad que incluso en la lengua quechua el “tiempo pasado” se traduce literalmente como “el ojo en el tiempo” (Wilkinson y D’Altroy 113-114). Desde esta perspectiva, el ser humano es solo un agente más dentro de la construcción temporal y no es el elemento primordial que lo determina.
Por ello, el pachacuti no interrumpe el tiempo de los runakunas, sino que propicia el surgimiento de nuevas temporalidades/realidades. Dentro de la perspectiva andina múltiples temporalidades/realidades pueden convivir afectándose unas a otras en menor medida (Allen 45). Por ello, a lo largo de la historia ha habido diversos pachacutis que han modificado el mundo de los runakunas, tanto naturales —la explosión de volcanes (Lozada 240)—, como sociales —la muerte del Inca Atahualpa (Trigo 60). Ambos eventos tienen en común que han transformado la percepción de la realidad y la situación del mundo. Sin embargo, dicho cambio no se mide desde cómo el ser humano es afectado, sino desde cómo la totalidad de lo que existe, donde el ser humano es un elemento más, es transformada. Por ello, es que el pachacuti, al igual que en Occidente, como lo demostró la pandemia, puede significar un cambio para peor: “El pachakuti no es siempre un mundo renovado y el advenimiento de una sociedad del buen vivir, sino también puede ser su contrario; hay el peligro permanente de la derrota y la degradación” (Rivera 91), siendo un claro ejemplo de eso la situación de los territorios colonizados luego de la Conquista.
No obstante, también abre las posibilidades de cambio para un tiempo y una realidad diferente. En la sociedad andina, el ser humano reconoce que sus acciones pasadas siempre regresan hacia él y generan un futuro desconocido que afecta a todo el sistema en el que vive: “The Andean cultural vision of a circulatory world, in which all action eventually turns back on itself, is one of many possible human ways of experiencing the world and acting within it” (Allen 195). Por ello, la humanidad valora la existencia de múltiples temporalidades y que su tiempo es finito. Los Apus (Montañas Sagradas) y las divinidades materiales, como la Pachamama (Madre Tierra), coexisten en este presente, pero han existido antes que ellos, y seguirán cuando el tiempo humano haya terminado. El tiempo de dichas entidades no-humanas trasciende la mera interpretación visual humana de la realidad y sirve como puente entre distintas realidades/tiempos. Por ello, su cuidado y protección se vuelven elementos fundamentales para los seres humanos que viven dentro de estos o en relación con ellos.
A manera de conclusión, en este breve ensayo, he querido revisar a través de la noción del pachacuti una forma diferente de repensar la crisis, tema vigente hoy más que nunca en el globo. A partir de este, he señalado como la crisis puede suponer tanto un resultado negativo como positivo para la humanidad. En los Andes, el pachacuti trae tanto renovación como destrucción, elementos presentes dentro del ciclo vital de las temporalidades. Por ello, el tiempo no es un reconocimiento abstracto del ser humano, sino la creación colectiva de múltiples perspectivas que determinan el presente. De esa manera, las sociedades humanas en los Andes aceptan su efimeridad y la responsabilidad que esta conlleva frente a los seres que lo trascienden el espacio y tiempo. Tal vez aceptar la fugacidad de nuestra existencia sea el primer paso para cambiar nuestra respuesta frente a una crisis futura y prepararnos para ella. Como lo demuestra la historia, los momentos de crisis siempre estarán presentes, y quién sabe si la próxima vez podamos afrontarlos.
[1] Palabra quechua que se traduce como personas.
About the Author
Pedro de Jesús Gonzales Durán is a Ph.D. candidate at the University of Wisconsin-Madison. He holds a B.A. and M.A. in Hispanic Literature from La Pontificia Universidad Católica del Perú. His research focuses on Latin American theater and performance, with a particular interest in the influence of Andean knowledge on theatrical practices, performative acts, and visual culture. His publications include "Post-Materiality in the Andes: Andean Performative Spaces in Yuyachkani" (2002, LATR) and "Andean Actancy: The Role of Objects in Yuyachkani’s Antígona" (2024, Chasqui).
Obras Citadas
Allen, Catherine. The hold life has: Coca and cultural identity in an Andean Community. Smithsonian Institute, 2002.
Latour, Bruno. ¿Dónde Estoy? Una guía para habitar el planeta. Taurus, 2021.
Lozada, Blithz. Cosmovisión, historia y política en los Andes. Compilada por Mary Money como parte de la colección de la Maestría en Historias Andinas y Amazónicas, Producciones CIMA, 2006.
Rivera Cusicusicanqui, Silvia. Un mundo ch'ixi es posible: Ensayos desde un presente en crisis. Tinta Limón, 2018.
Trigo, Pedro. “Pachacuti. Mundo al revés.” Revista latinoamericana de teología, vol. 8, no. 22, 1991, p. 51-70.
Wilkinson, Darryl, y Terence D’altroy. “The Past as Kin: Materiality and Time in Inka Landscapes.” Constructions of Time and History in the Pre-Columbian Andes. Editado por Edward Swenson and Andrew P. Roddick, University Press of Colorado, 2018, pp. 107–32.